Se trata de que el cículo avanza, en la ruleta, y se estrecha, poco a poco en torno al cuello, otra vez, y no nos damos cuenta. Se trata de que se pierden las horas sin haberlas estrenado, y al enterrarlas ni nos damos cuenta de que vamos de luto. Se trata de vivir a través del espejo, repitiendo el fotograma de la anterior sesión, como Houdini, y sin cadenas. Escapar siempre, huyendo permanentemente de todo, de nada de nadie, savoir faire, a mi manera. Se trata de no poder dormir, y tener clavada en la almohada la memoria, la de ayer, la de mañana, las anteriores y las siguientes.
Se trata, lo dije una vez, de morir por accidente.
Pero en la otra cara de los veinte duros, en la doble sesión hay nuevos espectadores, un número de magia nuevo en el que, sin trampa, ni cartón, el humo y los espejos se vuelven diáfanos y el camino se vuelve más amable en algunos trayectos. No calzamos las botas de pisar blancos en el campo para caminar, alegremente de la mano. Hacemos una pausa para cenar, dos veces por fin de semana, o las que falta hiciere, Sancho. Asiste el hermano humorista de Boomer, y aunque ella últimamente se marcha siempre pronto, suele quedar un roto, o dos, para las enmiendas. El resto de la tropa, incluídos nuevos reclutas bailan la rumba del tracatrá. A ritmo de tango.
Y el ciclo famoso, sin tatuajes, sigue ciclando, y rueda la rueda, y gira la noria...
Se trata, lo dije una vez, de morir por accidente.
Pero en la otra cara de los veinte duros, en la doble sesión hay nuevos espectadores, un número de magia nuevo en el que, sin trampa, ni cartón, el humo y los espejos se vuelven diáfanos y el camino se vuelve más amable en algunos trayectos. No calzamos las botas de pisar blancos en el campo para caminar, alegremente de la mano. Hacemos una pausa para cenar, dos veces por fin de semana, o las que falta hiciere, Sancho. Asiste el hermano humorista de Boomer, y aunque ella últimamente se marcha siempre pronto, suele quedar un roto, o dos, para las enmiendas. El resto de la tropa, incluídos nuevos reclutas bailan la rumba del tracatrá. A ritmo de tango.
Y el ciclo famoso, sin tatuajes, sigue ciclando, y rueda la rueda, y gira la noria...
2 comentarios:
Un post estupendo.
Enjoyed a lot! » » »
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